
Cada vez valoro más a la gente que escribe en el blog de manera constante, sin estos grandes lapsus de tiempo.
El viernes casi escribo una entrada, y de hoy ya no pasa. Hoy he estado viendo el blog de Rose minuscule. En el aparecen unos móviles de muñecos de trapo preciosos, dulces, poéticos y delicados. Me encantaría tener uno.