Para mi un pequeño placer cotidiano es acariciar a mi mascota.
Nuestra mascota se llama Pirraca. Es un ENORME conejo enano, que come mucho. Se ha comido parte del jardín, y parte del huerto, y un bonsái, ... pero aún así estamos encantados con ella.
Aunque no es el perro que nos gustaría tener y no interactúa de la misma manera, da gusto verla por el jardín. Cuando te ve, si no está tumbada a pata suelta, acude a tu lado para que le acaricies. Le damos hojas de plantas que le encantan y zanahorias y la mimamos todo lo que podemos.
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